lunes, 7 de agosto de 2017


Desde mi ingreso al Ejército de los Colombianos (si, de los Colombianos) porque son ustedes los que con sus impuestos, recursos naturales y esfuerzo diario, hacen posible desde 1819 cuando con pertrechos apoyaron la campaña libertadora, y hasta hoy permitiéndole a los hombres y mujeres seguir luchando por el bienestar, seguridad y tranquilidad de esta amada patria llamada COLOMBIA.

30 años dentro de las filas de esta gloriosa organización, me permitió conocer la grandeza del pueblo, la riqueza natural que poseemos, la historia que la acompaña, su cultura, su esplendorosa topografía, sus dos océanos, su variada gastronomía y un sin número de personas que con sus sonrisas siempre me tendieron la mano con alegría.

Es por ello que cuando porté los tres estilos de camuflado y las armas legitimas de esta república por designio del señor y por inspiración propia, pude apreciar de manera directa todo aquello que aquejaba a nuestro país, todo lo que le ocasionó mal trato, violencia y desolación, donde se demostró que verdaderamente hay gente que no quiere a su patria y que aún no sabe lo que significa sentirse Colombiano y menos el honor de ser soldado.

Hoy luego de 30 años de haber hecho parte de tan noble organización, quiero rendir tributo a todos esos sencillos ciudadanos que ingresan a ser soldados en todas sus categorías, a los civiles que trabajan para permitir el funcionamiento de la organización, a los señores suboficiales que ingresan para cumplir un papel fundamental en la jerarquía y a los oficiales que siempre buscan liderar con inteligencia la organización militar más antigua del país.

Dedico este párrafo a todos los hombres y mujeres que murieron durante mis 30 años en la institución, de norte a sur y de oriente a occidente, a ellos mi saludo con la mano derecha en mi frente, a ellos una plegaria de alabanza, a ellos mi rodilla en tierra y un minuto de silencio para que sus almas descansen en paz en la gloria del señor.

A mis amigos y compañeros de la Reserva Activa, mis sinceras felicitaciones por que ustedes escribieron años y años de historia militar, que solo los estudiosos podrán entender algún día cuando se escriba la verdad del sacrificio y aporte a esta hermosa nación. Hoy queda latente el juramento a la bandera de no abandonarla jamás, ya no será con las armas pero si con la conciencia ciudadana y la responsabilidad política y social.

Compatriotas de Colombia, mil y mil gracias porque sin ustedes jamás hombres como yo podríamos hoy gritar con libertad VIVA COLOMBIA, VIVA EL GLORIOSO EJÉRCITO DE LOS COLOMBIANOS.


“El camino puede ser difícil pero con tu ayuda lo podemos lograr”

4 comentarios:

  1. Mil felicitaciones a todos los miembros de nuestro glorioso ejército colombiano, y en especial para ti con mucho cariño

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  2. Muy buen articulo. Me gusto mucho.
    Dios te bendiga por tu amor a la patria y todo tu esfuerzo por hacerla un mejor lugar para todos.

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  3. Muy buen articulo. Me gusto mucho.
    Dios te bendiga por tu amor a la patria y todo tu esfuerzo por hacerla un mejor lugar para todos.

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En agradecimiento

Virgen de la Milgrosa -
Cerro El Cundí
(Santa Marta - Colombia)

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