Visita del Papa, cómo cambian los tiempos..... R.A.

1986 Visita Juan Pablo II

El cadete Martínez, nunca se imaginó la alegría que sentiría al estar en el año 1986 parado en el Aeropuerto El Dorado, como parte de la Banda de Guerra, cuando el fallecido General

Yanine Díaz Director de la Escuela Militar de Cadetes General José María Córdoba, con acento respetuoso y honorable expresó “Escuela Militar, honores a Su Santidad Juan Pablo Segundo, atención presente AR” tocando mi redoblante, se me salieron las lágrimas de alegría al verlo pasar frente a mí, a él, el sucesor de Pedro.

Apenas empezaba mi carrera de soldado, acabando de percibir la mano de la violencia como un joven cuando el M19 realizo la barbarie del Palacio de Justicia y el poder de la naturaleza se demostró en el municipio de Armero Tolima, dos hechos históricos que marcaron mi mente a los 18 años de edad.

Sin embargo, jamás olvido cómo el gobierno respetaba tanto a los militares y policías que fuimos nosotros los que rendimos los honores, fue el Ministro de Defensa el General Miguel Vega Uribe quien acompañó al presidente Belisario Betancourt. Fue ese noble papa quien visitó la Escuela Militar de Cadetes lanzando bendiciones a los integrantes de las Fuerzas Armadas de Colombia.

Hoy, ya de Coronel veo en directo la transmisión sorprendido, cómo los militares ya no son los actores importantes, porque el presidente Santos le da temor que sus amigos de las farc le reclamen el derecho a la igualdad, por no hacer nada que enoje a los futuros senadores de la República y sucesores de su poder, hoy las bandas se callaron y le dan paso a las filarmónicas.

Por su parte, el presidente utiliza al papa y lo invita mostrándose con la fachada del buen samaritano, del gran líder del país que no es, del hombre bondadoso y nobel, ya no lo acompañan los héroes militares, sino su esposa, único ser que considero lo apoya por su calidad de primera dama, aunque en discutida presentación personal el día del arribo, sin embargo, es palpable en esta visita, que la participación militar ya no es necesaria, es simplemente un actor que ya no le interesa al presidente porque al final, su cometido está cumplido.

Así mismo, la historia se repite y el papa regresa luego de una barbarie sin precedentes realizada por las farc y el eln, donde más que alegría por su resocialización lo que queda es un sin sabor de injusticia y falta de respeto a un pueblo victimizado por muchos años.

En ese orden de ideas, colombianos, acudan en masa a la visita, sean los excelentes anfitriones que saben ser, sin embargo, no dejen de recordar que Dios es nuestra guía, que el señor nos protege por encima de todo, que el papa es el sucesor de Pedro y que el país saldrá adelante con la bendición de él, pero tengan claridad que debe existir un gobierno para servirle al pueblo y no el pueblo al servicio de unas dinastías políticas y manipuladoras, que demuestran su poca pulcritud católica y moral. Recuerden las palabras del papa Francisco “no se dejen engañar”.

El camino puede ser difícil pero con tu ayuda lo podemos lograr”