En días pasados, los medios de comunicación entre
muchos RCN y CARACOL, les presentaron a los colombianos la noticia de supuesta presencia
de disidencias de las FARC y ELN sobre el sector de la localidad 20 de Bogotá, San
juan de Sumapaz y sus alrededores. Monumento Heroes del Sumapaz
Dijo el filósofo español, “quien olvida su historia, está condenado a repetirla”, frase apropiada para recordarnos que dentro del plan estratégico de las FARC, estuvo y puede seguir estando como objetivo la toma armada de la capital del país o en su efecto Medellín o Cali, acciones terroristas que causarían de haberse cumplido un gran impacto para los colombianos y el mundo, sobre su supremacía armada.
El páramo de Sumapaz está ubicado estratégicamente entre Cundinamarca, Meta, Huila, Tolima y lógicamente Bogotá, pero no se puede olvidar su cercanía con la antigua zona de despeje de más de cuarenta mil kilómetros cuadrados que les cedió el expresidente Pastrana entre los años 1998 y 2002, que al término de la misma las FARC continuaron con su propósito de llevar el terrorismo del campo a la ciudad.
A pesar de la visita de la alcaldesa de Bogotá por un día al sector, donde expresó que no hay presencia de guerrillas, algunos podrían pensar que el problema de esta localidad es un caso aislado, de momento o nuevo.
Sin embargo, la séptima conferencia de las FARC desarrollada en La Uribe Meta en 1982 proyectó su plan estratégico para la toma del poder, la octava conferencia en 1993 además de actualizar el plan estratégico, organizó la estructura en siete bloques y ordenaron ubicar el 50 % de todos sus efectivos sobre la cordillera oriental para la toma de Bogotá, por su parte la décima conferencia buscó consolidar el proceso de trasformación como grupo armado e iniciar como partido político.
Recuerden, las conferencias eran las reuniones de todos los “comandantes” de frentes con el estado mayor central de la organización terrorista y guerrillera en diferentes partes del país donde se tomaba decisiones sobre su actuar delictivo para los años siguientes, evento que casi siempre contaba con un promedio de 150 cabecillas guerrilleros.
Ante el fracaso de Andrés Pastrana con las FARC y la llegada de Álvaro Uribe, la política de seguridad democrática apoyó el Plan Patriota de las Fuerzas Militares que orientó sus esfuerzos con la recién creada Quinta División del Ejército en 1995 y el Comando Operativo de Acción Integral del Sumapaz activado en 2002, únicamente para neutralizar la intención del plan estratégico para la toma de Bogotá.
Prueba de las anteriores intenciones, se demostró con la toma guerrillera de Mitú capital de departamento en el año de 1998, hecho que utilizó Pastrana para buscar abiertamente la negociación con el grupo armado, donde lo dejaron con la silla vacía.
Analizar si el plan estratégico cumplió su cometido y dar respuesta a la pregunta ¿guerrilla se tomará a Bogotá? está bajo la óptica de cada colombiano, lo único cierto es la llegada de un exguerrillero a la presidencia, las curules en el congreso de las FARC y su partido político, la estrategia del pacto histórico y la identidad política de las alcaldías de Bogotá, Medellín y Cali, el relevo político en el congreso de las disidencias, las intenciones políticas del ELN, la incorporación de menores a los grupos armados, la primera línea y la identidad de grupos indígenas al portar la bandera del ELN y la imagen del CHE en la Plaza de Bolívar en la capital en días recientes.
Lo triste del tema, es que hablando con un excomandante de la hoy denominada Fuerza de Tarea Sumapaz, su voz se quebrantó y sus lágrimas salieron de sus ojos, al recordar la cara quemada por el frio de sus soldados y las manos llenas de ampollas en carne viva arreando las mulas para poder abastecer a las tropas en esta área, la misma que hoy es amenazada por negligencia política nuevamente colocando en riesgo a la ciudad que ellos protegieron.
“El camino puede ser difícil, pero con su ayuda
lo podemos lograr” “Soy Ciudadano”
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